Por fin. Tras años de negociaciones, el Parlamento Europeo ha aprobado la nueva directiva sobre Calidad del Aire. Una nueva norma que establece límites y valores objetivo para varios contaminantes mucho más estrictos a los actuales, que están aprobados desde 2008 y que no se corresponden con la apabullante evidencia científica que existe a día de hoy sobre la contaminación y sus terribles efectos en nuestra salud.
Los países habrán de alinearse con esos límites para 2030 -aunque algunos Estados Miembro podrán retrasarse hasta 2040- y, desde entonces, los indicadores de contaminación se revisarán cada cinco años para seguir acercándolos lo más posible a lo indicado por los estudios más recientes que existan. Las ciudadanos y los ciudadanos dispondremos de más información sobre los problemas de contaminación y tendremos, con especial énfasis en las personas más vulnerables, mayor protección y acceso a la justicia frente a los incumplimientos en los límites por parte de los países.
Aquí puedes revivir el momento de la aprobación:
¡Aprobada! 🟢
El Parlamento Europeo aprueba la nueva norma de Calidad de Aire. 👏
Una victoria importantísima para toda la ciudadanía 🇪🇺.
Enhorabuena a la sociedad civil y a todas y todos los que lo habéis hecho posible, @javilopezEU.https://t.co/Go0Tet5Xqu
El momento 👇 pic.twitter.com/wN7abEo65u
— Salud por Derecho (@Saludporderecho) April 24, 2024
La nueva norma pretende garantizar que la calidad del aire en la UE no sea perjudicial para la salud humana, los ecosistemas naturales o la biodiversidad y cuyo objetivo a largo plazo es eliminar la contaminación del aire para 2050. Algo de suma importancia teniendo en cuenta que el 97% de los ciudadanos europeos respiramos aire perjudicial para nuestra salud y que el aire contaminado está asociado a 300.000 muertes prematuras en nuestro continente, así como a el aumento de las enfermedades respiratorias y cardiovasculares, entra otras.
Desde Salud por Derecho celebramos la aprobación de esta directiva. «Es una medida clave y urgente para salvar vidas y asegurar un futuro más saludable y sostenible para quienes vivimos en Europa. Esta medida no solo busca mitigar los impactos devastadores de la contaminación del aire en la salud pública, también promover un entorno más limpio y seguro para las próximas generaciones” asegura Vanessa López, directora de la organización. “Al abordar la crisis de la contaminación del aire estamos protegiendo la salud de las personas al mismo tiempo que salvaguardamos el medio ambiente”.