En un acto en el Congreso de los Diputados, la sociedad civil pide que España vuelva a participar en el Fondo Mundial con una cifra que ronde los 100 millones de dólares para los próximos tres años. El portavoz del grupo Popular explica que la situación política y económica actual impide cuantificar una aportación.
Madrid, 13 de septiembre – Hoy, en una reunión en el Congreso de los Diputados organizada por organizaciones de la sociedad civil (Salud por Derecho, Oxfam Intermón e ISGlobal), todos los grupos parlamentarios (PP, PSOE, Unidos Podemos-En Comú Podem-En Marea, EAJ-PNV, CIUDADANOS, Esquerra Republicana y Partido Demócrata Catalán y Compromís, del Grupo Mixto) se han reunido para expresar la posición del Parlamento de cara a la Conferencia de Reposición de Recursos del Fondo Mundial de Lucha contra sida, la tuberculosis y la malaria, que se celebra a partir del día 16 de este mismo mes en Montreal, Canadá.
A través de una carta dirigida al Ministro de Exteriores, los y las diferentes portavoces de todos los grupos parlamentarios han querido reiterar el compromiso de su partido a la lucha contra las pandemias a través del Fondo Mundial, siguiendo la línea marcada en su día tras el debate y la aprobación de la Proposición no de Ley 161/000570 del pasado 28 de abril. La carta solicita, por un lado, “una presencia de alto nivel del Gobierno de España en la próxima Conferencia de Montreal para manifestar allí el compromiso político de España junto con la comunidad internacional” y, por el otro, “que la delegación española manifieste y concrete su plan de aportaciones a lo largo de los próximos tres años”.
“Las donaciones al fondo deben formar parte de una política seria de cooperación al desarrollo” aseguró Carles Campuzano, diputado de Partido Demócrata Catalán, que fue el primero de los diputados en hablar. “De esta reunión debe salir un compromiso firme” aseguraba Ignasi Candela, diputado de Compromis, “y el nuestro es firme y decidido para poder luchar contra estas tres pandemias”. Por su parte, Aitor Esteban, diputado del PNV, aclaraba: “Es bueno que todos los grupos firmemos y la aportación debe ser importante, pero la clave la tiene el Gobierno, no la Cámara”.
Joan Olòriz, de Esquerra Republicana, recordaba el papel imprescindible del Fondo Mundial, “prioritario para las políticas de cooperación” y Francisco Igea, portavoz de Ciudadanos apelaba a la “responsabilidad común de todos en este tema dada la situación política actual”.
“No se puede usar la crisis económica como excusa para el respeto de los derechos humanos y el derecho a la salud” dijo Ángela Ballester, de Unidos Podemos. “Esta reunión es un primer paso y un paso simbólico, pero no basta con este compromiso. Esta lucha incluye un trabajo que implica que el parlamentarismo y el legislativo funcionen. Hay que trabajar para que el Gobierno rinda cuentas y se comprometa con esta causa”.
Jesús Maria Fernández, portavoz de sanidad PSOE, destacó también el consenso de “todos los grupos en cuanto a esta vuelta a la financiación” y se remitió a la carta para manifestar que la aportación debe seguir tres criterios: ser acorde a las necesidades del Fondo Mundial, ser acorde a la capacidad económica de España y ser homologable a otros socios europeos.
En último lugar, Jose Maria Chiquillo, portavoz del PP en la Comisión de Cooperación, aclaraba que “para el día 16, en Canadá existirá un compromiso financiero” aunque no pudo dar una cifra concreta de la aportación “por la falta de capacidad económica y política en este momento”. Además, Chiquillo anunció que ese día también se anunciará un canje de deuda por salud de 18 millones de dólares con la República Democrática del Congo, Camerún y Etiopia.
Al final de la reunión, Charlotte Diez, de la división de Relaciones Exteriores del Fondo Mundial, aseguraba que “el Fondo Mundial valora mucho la asociación con España y espera que, a la luz del fuerte consenso parlamentario que existe entre todos los grupos políticos, a quien agradecemos mucho el apoyo, España pueda anunciar en la Conferencia de Reposición que vuelve como donante a un nivel similar a los países y economías vecinas”.
España llegó a donar más de 650 millones de euros al Fondo Mundial, siendo uno de sus mayores donantes, pero desde 2011 ha dejado de financiar este organismo. “Italia podría ser un gran ejemplo a seguir. Dejó de ser donante del Fondo durante varios años y volvió con 100 millones de euros en la anterior Conferencia de Reposición” dice Vanessa López, directora de Salud por Derecho.
“El Gobierno español debe anunciar un compromiso firme, generoso e incondicional con el Fondo Mundial, proporcional a un país que representa la 13ª economía más grande del planeta” añade Ricardo Magán, Director del Departamento de Campañas y Ciudadanía de Oxfam Intermón.
“Vivimos un momento político extremadamente complejo. El consenso parlamentario es un compromiso inequívoco con el Fondo Mundial que el próximo Gobierno deberá cumplir”, concluye Gonzalo Fanjul, director del área de Análisis de ISGlobal.
El Fondo Mundial de Lucha contra sida, tuberculosis y malaria es una asociación entre gobiernos, sociedad civil, sector privado y personas afectadas por estas enfermedades que, desde 2002, recauda e invierte más de 3.500 millones de euros al año. En su último informe, asegura que desde su fundación se han salvado 17 millones de vidas gracias a las inversiones realizadas, y se marca como objetivo alcanzar los 22 millones a finales de 2016.